Publicado por: Ángel Amilibia Hergueta | ISNI: 0000000517782974
El momento en el que se decide dar un paso adelante e ir en búsqueda de un embarazo es muy importante. Es una decisión que afectará de lleno a la vida de los padres y, sobre todo, a la madre durante los meses de gestación, así que se debe tener muy claro y bien pensado para saber qué quieres que salga en tu test de embarazo.
Una vez que se tiene decidido, llega la fase de ir a por el bebé. En principio, solo haría falta seguir con la rutina sexual que ya estaba establecida antes de esa decisión pero, ahora, se debe hacer sin protección. Parece que no tiene ninguna complicación, ¿no? Pues, a lo contrario de lo que se podría pensar, no es fácil quedarse embarazada. O, por lo menos, no tan fácil.
A continuación vamos a ver por qué y desmontaremos algunos falsos mitos que rodean al embarazo.
Lo principal que hay que saber es que no te puedes quedar embarazada cualquier día del mes en el que no haya menstruación. De hecho, solo se puede producir una fecundación durante unos tres días al mes. Aunque pueda sorprenderte, tiene una explicación muy fácil. La concepción solo ocurre cuando la mujer está en sus días fértiles, es decir, durante su ovulación, que normalmente se encuentra en medio del ciclo menstrual. Es entonces cuando el espermatozoide puede encontrarse con un óvulo a su paso por las Trompas de Falopio.
Vale, has calculado unos 14 o 15 días desde el primer día de menstruación, has mantenido relaciones sexuales sin protección y no te has quedado embarazada. ¿Hay que alarmarse? Por ahora, no.
De hecho, no es fácil quedarse embarazada en el primer intento. Hasta que no pase un año en el que se ha intentado la fecundación sin cesar, no se puede considerar que existe algún problema. Será a partir de esos 12 meses cuando debes plantearte acudir a un especialista para que te dé su opinión y haga las pruebas ginecológicas correspondientes. Una de las pruebas que mucha gente desconoce pero que suele recomendarse si no hay manera de quedarse embarazada es el cariotipo, un estudio de los genes que pueden revelar problemas desconocidos hasta ahora.
Las pruebas de fertilidad también las debería realizar el hombre de la pareja. Con un espermiograma se puede detectar si los problemas de fecundación vienen de parte masculina.
Existen algunas creencias populares sobre el hecho de si es fácil quedarse embarazada o no que conviene desmontar.
Si eres joven, quieres ser madre o por lo contrario iniciar un tratamiento anticonceptivo, una analítica ginecológica puede ayudarte a controlar y conocer mejor tu cuerpo.
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Si has sufrido abortos de repetición o no consigues quedarte embarazada, podría ser una alteración genética de los progenitores. Descártalo con un estudio del cariotipo.