Publicado por: Ángel Amilibia Hergueta | ISNI: 0000000517782974
Tener escalofríos sin fiebre puede sorprender a más de uno, que acto seguido se preguntará si está bien de salud o no. Como bien es sabido por todos, un escalofrío es una sensación de frío y temblores. Pero quizás no sabías que se trata de una contracción muscular que el cuerpo realiza de forma automática para regular la temperatura interior.
Por otro lado, la fiebre es la respuesta del organismo tanto a agentes infecciosos (lo más común) como a causas no infecciosas, como lesiones, toxinas, etc. Normalmente va asociada a síntomas como los escalofríos.
Pero cuando alguien sufre escalofríos sin fiebre, ¿qué le puede estar ocurriendo? Estas son las 14 causas posibles. Verás que algunas son más preocupantes que otras. Dependiendo de la gravedad, deberás acudir a urgencias o pedir una visita de medicina general y realizar las pruebas necesarias.
Como hemos comentado, los escalofríos sirven para dar calor al cuerpo. Cuando el clima es frío, son inevitables.
Comer alimentos con agentes patógenos puede provocar escalofríos con o sin fiebre. En algunos casos pueden ir acompañados de diarrea, vómitos y calambres.
Cuando la dosis de los fármacos es incorrecta se corre el riesgo de dañar órganos como el hígado e intoxicarse. Uno de los síntomas son los escalofríos sin fiebre.
Deficiencias como las de la vitamina B, especialmente la B12, pueden provocar escalofríos. Una analítica de vitamina B12 puede determinar si tus niveles son correctos.
Las personas con poca grasa en el cuerpo están más desprotegidas del frío, de manera que experimentan escalofríos más a menudo.
Insectos como las arañas o los mosquitos, que dejan veneno en la piel con sus picaduras, pueden desencadenar una reacción alérgica que incluya escalofríos.
El desequilibrio hormonal que puede llegar a causar el estrés y la ansiedad, en ocasiones, afecta a la regulación térmica del cuerpo y a todo el sistema inmune en general.
Durante la menopausia se experimentan sofocos por los cambios hormonales. La sudoración que dejan en la piel cuando terminan, pueden provocar escalofríos.
Una anemia ferropénica se caracteriza por los niveles bajos de hemoglobina en sangre. Eso dificulta el transporte de oxígeno a los órganos. Además de los escalofríos, algunos de los síntomas son tener las manos y los pies fríos, vértigo o cansancio. Una analítica de anemia te permitirá salir de dudas.
Cuando la presión arterial es más baja de lo normal, el corazón, el cerebro y el resto de órganos no reciben sangre suficiente. Los mareos, la visión borrosa, la debilidad o los escalofríos en el cuerpo son síntomas típicos.
Una infección de los bronquios (vírica o bacteriana) puede provocar tos, dolores en el pecho, problemas para respirar e, incluso, escalofríos sin fiebre.
La tiroides es fundamental para producir hormonas que aseguran un correcto metabolismo del cuerpo. Las personas que sufren hipotiroidismo tienen sensación de cansancio todo el día, sensibilidad al frío, escalofríos sin que les suba la temperatura corporal o alteraciones menstruales.
Los depósitos sólidos que se forman en la vesícula biliar, normalmente por colesterol, pueden no generar síntomas o provocar dolor en el abdomen, escalofríos en el cuerpo y producir una coloración amarillenta de la piel.
Además de todas las otras causas, diversas enfermedades también presentan escalofríos sin fiebre. Algunas de ellas son el resfriado común, la diarrea infecciosa, el citomegalovirus, la toxoplasmosis o la sinusitis.
¿Te sientes débil o has notado hormigueo en las extremidades? Estas son las consecuencias de un desnivel en los valores de vitamina B12. Hazte un análisis y descubre si necesitas tomar algún suplemento.
Si te encuentras cansado o sufres transtornos digestivos, es posible que se deba a un bajo nivel de hierro en tu cuerpo. Con este análisis podrás hacerte un chequeo analítico completo en sangre con pruebas de hierro y vitaminas.
¿Necesitas resolver alguna duda con tu médico y no puedes esperar más? Solicita una visita de medicina general con uno de nuestros profesionales y evita las listas de espera. Determinar cuanto antes cuál es el problema puede evitar que éste vaya a peor.