Publicado por: Ángel Amilibia Hergueta | ISNI: 0000000517782974
La ferritina es una proteína almacenada en los glóbulos rojos que tiene la función de almacenar el hierro e ir liberándolo de forma controlada. Tener la ferritina alta se puede relacionar con muchas causas distintas y es algo que, según la Asociación Española de Hemocromatosis, afecta al 5% de los hombres mayores de 50 años en España.
Igual que cuando se tiene la ferritina baja, puede ser necesario realizar pruebas como una analítica de anemia para determinar los motivos de esta irregularidad en el organismo. A continuación te vamos a informar un poco más sobre este tema para que sepas cuándo deberías ponerle remedio.
Valores normales de ferritina
Los valores óptimos de ferritina en sangre dependen de la edad y del género. No todos los especialistas coinciden en establecer unos mismos niveles, aunque una relación estimada sería así:
Hombres: de 30 a 300 nanogramos de ferritina (ng) por mililitro (ml) de sangre.
Mujeres: de 18 a 200ng/ml.
Recién nacidos: de 25 a 200ng/ml.
Bebés de 1 mes de edad: de 200 a 600ng/ml.
Bebés de 2 a 5 meses de edad: de 50 a 200ng/ml.
Niños de 6 meses a 15 años de edad: de 7 a 150ng/ml.
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Ferritina alta: Síntomas
Muchas veces nuestro cuerpo sufre anomalías pero sus síntomas pueden pasar desapercibidos. Es el caso de muchas personas que tienen la ferritina más alta de lo normal. Con el paso del tiempo, si el nivel de ferritina sigue sin bajar, suelen acabar apareciendo estos síntomas:
- Dolor de articulaciones.
- Calambres.
- Oscurecimiento de la piel.
- Fatiga.
- Dolor en el abdomen.
- Problemas cardiacos.
Ferritina alta: Causas
Entre las causas más frecuentes de la ferritina elevada encontramos:
- Síndrome metabólico. Puede ser debido a factores genéticos, mala alimentación y escaso ejercicio.
- Hepatitis vírica. Inflamación que afecta al hígado, principal órgano de almacenamiento de hierro.
- Hepatitis alcohólica. Inflamación del hígado por exceso de ingesta de alcohol.
- Intoxicación. Por ejemplo por injerir demasiados medicamentos que contienen hierro.
- Hemocromatosis. Enfermedad que acumula hierro en los órganos y sistemas, perjudicando su funcionamiento. Puede ser genética.
- Hemosiderosis. Enfermedad caracterizada por el exceso de hemosiderina, una sustancia que deriva de la hemoglobina cuando en el organismo hay más hierro del necesario.
- Enfermedades genéticas minoritarias. Como el Síndrome de hiperferritemia con cataratas, la Aceruloplasminemia o la Hiperferritinemia hereditaria benigna.
- Neoplasia. Formación de tejido nuevo de carácter tumoral (benigno o maligno) en alguna parte del cuerpo.
- Recibir repetidas transfusiones sanguíneas.
- Anemias con sobrecarga de hierro.
Ferritina alta: Tratamiento
Si mediante los análisis correspondientes se detectan unos niveles moderadamente altos de ferritina, el tratamiento suele basarse en:
- Cambios en la dieta. Normalmente se deben evitar alimentos con un alto contenido en hierro, como verduras de hojas verdes, nueces, patatas, pan integral, brócoli, sandía o semillas.
- Medicación. Si el médico lo cree oportuno, se pueden recetar medicamentos que ayuden a los riñones a filtrar el hierro a través de la bilis o la orina.
- Donaciones de sangre. El movimiento de la sangre disminuye el nivel de ferritina y donar es uno de los tratamientos más eficaces. Antes, es recomendable realizar una analítica básica completa para comprobar que se puede donar sin riesgos.
Para aquellos pacientes que tengan el origen de la ferritina alta en enfermedades como las que hemos visto, se deberá seguir el tratamiento específico para cada una de ellas.