Publicado por: Ángel Amilibia Hergueta | ISNI: 0000000517782974
En la consulta de un otorrinolaringólogo es bastante común que acudan pacientes quejándose de tener la nariz tapada “siempre”. Esto provoca que se termine respirando por la boca y sea habitual roncar y tener la boca seca por la noche.
A continuación te vamos a explicar qué causas pueden provocar que tengas la nariz congestionada siempre, tanto si son los dos orificios (bilateral) o solo uno (unilateral), y te explicaremos cómo de trata cada caso.
El tabique nasal es el cartílago que divide las fosas nasales en dos. Es bastante más largo de lo que podemos observar a simple vista, así que puede estar desviado pero sin que se note en el aspecto de tu nariz. En otros casos sí que se ve que la nariz está torcida.
Las causas suelen ser un golpe en la nariz o una afección presente desde el momento de nacer. Es posible que también provoque sangrado nasal, dolor facial o preferencia de dormir sobre un lado concreto. La solución es una cirugía muy sencilla llamada septoplastia.
Llamamos rinitis a la inflamación del revestimiento mucoso de la nariz. Cuando se inflama por culpa de una alergia desconocida y no se hace nada para evitarla o tratarla es posible que dé esa sensación de tener la nariz tapada siempre, así como picazón de ojos, nariz o garganta, estornudos, tos o goteo nasal.
Los ácaros, el polen, la harina o los animales domésticos son algunos de los alérgenos con los que quizás estás en contacto sin saber que te provocan alergia y, como consecuencia, se genera esta congestión nasal constante. Visitar a un experto en alergología será el primer paso para descubrirlo.
La sinusitis crónica es una afección en la cual los senos paranasales (las cavidades que rodean las fosas nasales) se inflaman durante un tiempo prolongado. La obstrucción nasal permanente, la reducción del sentido del gusto y la hinchazón, dolor o sensibilidad de ojos, mejillas, nariz y frente son síntomas habituales.
El tratamiento para la sinusitis crónica suele empezar por el uso de medicamentos, por ejemplo antibióticos si existe infección bacteriana. Si el tratamiento farmacológico se resiste, se suele optar por una cirugía endoscópica.
Los cornetes nasales son unas estructuras de hueso esponjoso recubiertas por mucosa que sirven como filtro del aire. Puede producirse una hipertrofia de los cornetes por causas como una rinitis alérgica, factores anatómicos o enfermedades inmunológicas o endocrinológicas. Los contaminantes tóxicos, determinados medicamentos o incluso la humedad también pueden ser causas de un agrandamiento de los cornetes.
En casos que tienen que ver con alergias y demás agentes externos se opta por medicación. En el resto de casos el tratamiento más frecuente es una cirugía llamada turbinectomía.
Una sinequia nasal es una adherencia entre la pared lateral y la pared medial. Puede ser causado por una intervención quirúrgica anterior, infecciones sufridas, colocaciones de sondas de alimentación o aspiración, cauterizaciones nasales, etc. produciendo obstrucción nasal o costras.
Para tratar la sinequia nasal y volver a respirar sin dificultad se suele extirpar la lesión mediante un bisturí convencional, un bisturí eléctrico o láser.
Los pólipos nasales son formaciones blanquecinas benignas que se producen en el interior de las fosas nasales por un proceso inflamatorio de la mucosa, llegando a obstruir completamente el orificio nasal.
El tratamiento consiste en extirpar el pólipo mediante una cirugía endoscópica endonasal mientras se sigue un tratamiento con medicamentos corticoides.
Los tumores benignos más comunes del interior de la nariz, además de los pólipos nasales, son fibroangiomas, papilomas, osteomas, adenomas y angiomas. Los tumores malignos son carcinomas, sarcomas, cordomas, melanomas, estesioneuroblastomas y adenocarcinomas.
Los tumores, además de generar la sensación de tener la nariz tapada siempre, pueden presentar síntomas como sangrados persistentes, goteo de mocos por un solo lado y con mal olor, dolores faciales, bultos en la cara o el paladar, o pérdida de olfato.
Cada tipo de tumor tiene un tratamiento distinto. Algunos se tratan quirúrgicamente, otros requieren radioterapia/quimioterapia y en algunos casos es necesario combinar ambos tratamientos.