¿Qué ocurre en la semana 19 del embarazo?
19 semanas de embarazo
La mamá: Que tu cuerpo está cambiando es más que evidente. Tu barriga ya tiene la forma propia de una embarazada, tus pechos han aumentado de tamaño, tu piel es más sensible y has ganado algo de peso.
Todos estos cambios pueden derivar en pequeños problemas estéticos muy comunes durante el embarazo. Destacan las manchas en la piel y las arañas vasculares.
Durante el embarazo, la piel es mucho más sensible y más reactiva a factores externos como el Sol. Además, durante la gestación, la producción de melanina aumenta y, consecuentemente, es más habitual que aparezcan manchas oscuras en zonas donde los rayos solares inciden directamente. Si crees que tu caso tiene alguna peculiaridad, siempre puedes acudir a un dermatólogo para consultarle tus dudas.
Las arañas vasculares o varices son dilataciones de las venas, y sobre todo, afectan a las piernas. Durante el embarazo, los cambios hormonales y el aumento de peso pueden favorecer su aparición. Aunque durante la gestación no es conveniente realizarse ningún tratamiento, existen técnicas para eliminarlas a posteriori, como por ejemplo el láser o las inyecciones esclerosantes.
Es importante saber que todos estos cambios que sufre tu cuerpo son normales y no debes avergonzarte de ellos. Tu cuerpo irá volviendo a la normalidad una vez pasada la cuarentena. Como en todo proceso de cambio, en función de tus características físicas puede que tardes más o menos a recuperarte.
Aumento de peso
El aumento de peso en la semana 19 debería encontrarse entre los 3,5 kg y los 6 kg.
El bebé: El futuro bebé sigue desarrollándose. A punto de llegar a la mitad del embarazo, el feto ya presenta muchas características propias de un cuerpo humano.
El hecho de que sus extremidades ya estén formadas y su tamaño sea más proporcionado que en las primeras semanas hace que el bebé se mueva mucho más que antes. Es posible que ya hayas notado los primeros movimientos dentro de tu barriga.
En cuanto al sexo del bebé, recuerda que ya es detectable, siempre y cuando el feto esté colocado de forma adecuada durante la ecografía.
Esta semana el futuro bebé tiene un tamaño semejante al de un mango. Su longitud es aproximadamente de 15,3 centímetros y ya pesa 240 gramos.