¿Qué ocurre en la semana 25 del embarazo?
25 semanas de embarazo
La mamá: ¡Te encuentras en la mitad del sexto mes de embarazo! Muchos especialistas recomiendan realizar una quinta visita ginecológica y una ecografía llegados a este momento de la gestación.
Es importante mantener un control de tu embarazo en todo momento para evitar cualquier contratiempo y poder estar más tranquila. Puede ser un buen momento para comentar con tu ginecólogo los resultados de la analítica del segundo trimestre si ya te la has realizado o sugerir que te la realice antes de finalizar el segundo trimestre.
Una cosa muy importante a tener en cuenta a partir de ahora es la temperatura corporal. Un aumento considerable de la temperatura interna de nuestro cuerpo puede afectar directamente a nuestro bebé y a nuestro organismo, produciendo mareos y desmayos. Por ello, se recomienda no darse baños con agua caliente ni tomar el sol durante largos periodos de tiempo. Es importante saber que si estás enferma y tienes fiebre, antes de aguantar sin tomar ningún medicamento, debes consultar con tu médico, ya que un aumento de temperatura puede repercutir negativamente a tu bebé y a tu propia salud.
Asimismo, el calor puede afectar a la circulación sanguínea, potenciando la aparición de varices. Por este motivo también se dice que depilarse con cera caliente puede no ser la mejor opción durante estos nueve meses.
Otro aspecto a tener en cuenta a estas alturas del embarazo es la aparición de vello corporal, consecuencia de un aumento de las hormonas sexuales. Es habitual que aparezca, sobretodo, en la línea alba, que va desde la parte superior del abdomen hasta la parte inferior, pasando por el ombligo. Normalmente, este vello desaparece una vez las hormonas vuelven a la normalidad.
Aumento de peso
Lo recomendado en este estadio del embarazo es un aumento de peso alrededor de los 6 kg y los 9 kg, aproximadamente.
El bebé: Entre la semana 25 y 26 de embarazo se empieza a segregar el surfactante pulmonar. Esta sustancia es la que permite a los pulmones ser autónomos y poder responder de forma adecuada una vez el bebé esté fuera del útero materno. Sin esta sustancia, el bebé no sería capaz de respirar y, muy probablemente, no podría seguir viviendo.
Es importante saber que una dieta inadecuada afecta directamente a la secreción del surfactante pulmonar y, consecuentemente, puede aumentar la posibilidad de desarrollar patologías respiratorias.
Cuando se habla de bebés prematuros y límite de viabilidad para ser compatibles con la vida, se tiene muy en cuenta el momento en el que el feto empieza a generar esta sustancia, ya que es la responsable de dar independencia a nivel respiratorio al futuro bebé.
Esta semana el feto tiene un tamaño semejante al de una coliflor. Su longitud es aproximadamente de 34,6 centímetros y ya pesa 660 gramos.